El estado vegetativo es una de las condiciones clínicas más desconocidas para la ciencia y en la actualidad no existe un método para diagnosticar con exactitud la gravedad de un paciente con daño cerebral.
Ahora un grupo de científicos argentinos y británicos creó un método que ayuda a establecer con más precisión las posibilidades de recuperación de estos pacientes.
Los expertos de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y de la Universidad de Cambridge, entre otras instituciones, utilizaron un método de condicionamiento clásico –también llamado pavloviano- para determinar si los sujetos aún tienen conciencia.
Trabajando con 22 personas en estado vegetativo o de mínima conciencia –un número elevado para este tipo de estudios- los científicos midieron las respuestas de los pacientes a un estímulo determinado y comprobaron que algunas personas sin evidencia de conciencia mostraron capacidad de aprendizaje.
Uno de los autores del estudio, el doctor Diego Shalóm, investigador de la UBA y del Instituto de Neurología Cognitiva de Argentina, dijo a BBC Mundo que esta capacidad de aprendizaje es un buen indicador de la posibilidad de restablecimiento del enfermo.
"Observamos que los pacientes que mostraron mayor nivel de respuesta fueron los que más progresaron", afirmó Shalóm, cuyo trabajo fue publicado en la prestigiosa revista científica Nature Neuroscience.
Método objetivo
"Observamos los pacientes que mostraron mayor nivel de respuesta fueron los que más progresaron"
Diego Shalóm, investigador de la Universidad de Buenos Aires.
Uno de los problemas del diagnóstico de los llamados "desórdenes de la conciencia" es que en la actualidad se realiza a través de una serie de pruebas clínicas cuyos resultados se determinan "a ojo".
"Es muy subjetivo: distintos médicos le dan al paciente distintos diagnósticos", señaló Shalóm.
Es por eso que los investigadores crearon un método que busca ser más objetivo.
Utilizando un aparato llamado un electromiógrafo, midieron la actividad muscular que los pacientes generaron en respuesta a un particular estímulo: un sonido, seguido de un ligero soplido de aire en uno de sus ojos.
La reacción de cerrar el ojo ante un soplido es un acto reflejo, que se da incluso en estado de inconciencia.
Pero los investigadores repitieron ambos estímulos unas 70 veces para determinar si los sujetos tenían capacidad de eventualmente vincular el sonido con el cierre del ojo.
De esa forma establecieron que algunas personas en estado vegetativo, que según las pruebas tradicionales no mostraban señales de conciencia, seguían teniendo capacidad de aprender.
Ventajas
Una herramienta de diagnóstico más precisa para los trastornos de conciencia no sólo tendría implicaciones científicas, sino también éticas, ya que podría permitir a los médicos y a los familiares tomar decisiones más informadas respecto al futuro de sus seres queridos.
Según el doctor Shalóm, esta nueva metodología podría aplicarse "en cualquier hospital del mundo" ya que el aparato que requiere es "pequeño, portátil y barato".
Tras el estudio con 22 pacientes realizados en hospitales de Buenos Aires, el equipo de expertos ha comenzado a ampliar sus pruebas y prepara un gran ensayo clínico junto con colegas en Estados Unidos y Bélgica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario